Hay días en que desearía que todo lo vivido no haya sido más que un mal sueño, pero tristemente es realidad. Cuando el pesar quiera agobiarte, y se agolpen las lágrimas debido a la frustración, necesitas recordar que no estás pasando en soledad esa prueba. Dios está contigo. El te promete estar contigo cuando pases por aguas profundas y ríos de dificultad. No ha de abandonarte, siempre está contigo, aunque no lo sientas, El está. El te ama, y siempre va contigo. No temas, solo cree.
Cuando pases por aguas profundas,
yo estaré contigo.
Cuando pases por ríos de dificultad,
no te ahogarás.
Cuando pases por el fuego de la opresión,
no te quemarás;
las llamas no te consumirán.